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Prepara un pesto de kale, hemp y aceite de linaza

Una salsa distinta al clásico italiano, pero con una buena dosis de proteína vegetal y ácidos grasos esenciales.

A veces se antoja un buen pesto casero para acompañar a nuestra pasta favorita, para untar en una focaccia o para preparar unos deliciosos montaditos o bruschettas. Si no somos tan tradicionales, podemos jugar con este clásico de la comida italiana.

Aunque el pesto tiene como base albahaca y piñones, podemos usar el mismo principio para preparar una salsa llena de proteínas de origen vegetal, además de ácidos grasos. Para lograrlo, debemos recurrir a las deliciosas hojas del kale y las semillas de hemp — también conocidas como semillas de cáñamo.

El hemp es una fuente completa de aminoácidos, fibra, grasas, omega-3 y omega-6, hierro, zinc, magnesio, potasio y vitamina B. Se le puede encontrar en semillas, en corazones o en polvo. En combinación con el kale, hacen de esta receta el pesto de los súper alimentos.

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Tiempo de elaboración | 15 minutos
Dificultad | Fácil
Personas | 4 a 6

Ingredientes

  1. 2 a 3 dientes de ajo
  2. 3 tazas de kale (*)
  3. 3/4 taza de semillas de hemp (**)
  4. 2 cucharadas de jugo de limón
  5. 3/4 cucharadita de sal de mar fina
  6. hojuelas de ají rojo (peperoncino, opcional)
  7. 1/4 taza de aceite de linaza (***)

Cómo preparar el pesto de kale, hemp y aceite de linaza

  1. En un procesador de alimentos, agrega los dientes de ajo y procesa hasta que estén bien picados.
  2. Agrega el kale, las semillas de hemp, el jugo de limón, sal y pimienta.
  3. Comienza a procesar, mientras agregas el aceite de linaza en un hilo.
  4. Continúa procesando hasta que el pesto llegue a la consistencia deseada — puedes detener de vez en cuando para bajar lo que se acumule en los lados.
  5. Prueba y rectifica con un poco más de limón, sal y/o pimienta.

Si lo utilizas con pasta, asegúrate de preparar sólo la cantidad que vayas a comer al momento. Es mejor guardar el resto del pesto en un recipiente con un poquito más de aceite, para mantener su textura y propiedades. Cuando lo vayas a utilizar, agrega a una porción de pasta recién hecha — no lo vayas a calentar directo al sartén, pues puede perder sus propidades.

Para darle otro toque de sabor, puedes acompañar con un poco de queso parmesano rallado y/o hojuelas de ají seco (peperoncino).

Nota: (*) Si no encuentras kale o col rizada, se podría sustituir con acelgas. (**) En lugar de semillas de hemp, nueces tostadas quedan muy bien. (***) Si no encuentras aceite de linaza, puedes usar aceite de olivo prensado en frío.

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