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Prepara las alcachofas al vapor con salsa verde

Una opción deliciosa para aquellos que desean comer más de este delicioso vegetal.

Las alcachofas no sólo son una verdura con corazón, también le hacen bien al nuestro. Sus compuestos amargos contribuyen a bajar el colesterol en la sangre (claro, si no la comes todo el tiempo a los cuatro quesos o algo así). Tienen bastante vitamina C y antioxidantes para protegerte de los radicales libres. Además, son una buena fuente vitamina K, buena para la salud de tus huesos y cerebro.

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Si estás buscando una forma saludable y deliciosa de preparar las alcachofas, aquí la tienes.

Tiempo de elaboración | 1 hora
Dificultad | media
Personas | 4

Ingredientes:

  1. 2 alcachofas grandes

Para la salsa

  1. 1/2 taza de tomate
  2. 1/4 taza de queso Asiago
  3. 1/3 taza de perejil
  4. 1/2 taza de albahaca
  5. 2 cucharadas de menta (opcional)
  6. 2 cucharadas de cebollino
  7. 1/4 taza + 2 cucharadas de aceite de oliva de la Copa
  8. 2 ajo
  9. 1 chalotte
  10. 1 cucharada de alcaparras
  11. 1 cucharada de jugo de limón
  12. 1/4 cucharadita de ralladura de limón
  13. 1 1/2 cucharaditas de vinagre de vino blanco o al gusto
  14. 1/2 cucharadita de pimientos rojos machacados
  15. Sal y pimienta al gusto

Cómo hacer alcachofas al vapor con salsa verde

Corta el tallo y cerca de 1 1/2 pulgadas de la parte superior, a continuación, con las tijeras corta la punta de cada hoja.
Colócalas en una olla grande con agua hirviendo y coloca una toalla húmeda en la parte superior para mantenerlas húmedas y sumergidas durante la cocción.

Hierve por unos 35 – 50 minutos, dependiendo del tamaño. No cubras con una tapa o pueden quedar amargas. Prueba una hoja para ver si está lista, debe retirarse con facilidad. Tampoco quieres que se cocinen de más. En lo que las alcachofas están listas, podemos encargarnos de la salsa.

Pica el tomate en pedazos pequeños, finamente tritura el Asiago, pica las hierbas y alcaparras, y también el echalote. Pica el ajo muy fino, exprime el jugo de limón, coloca todo en un tazón y mezcla bien. Deja reposar un rato para que se incorporen bien todos los sabores.

Una vez que esté todo listo, sirve en un plato las alcachofas y rocía un poco de salsa por encima. Cuida que la salsa quede dentro de las hojas para que cuando la vayas comiendo esta haga su aparición y los sabores se cocinen de la forma más perfecta posible.

Fuente: Cali-zona

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