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Encanta con un Gratinado de acelga y huevo [Cocina de la Abuela]

Ella siempre nos sorprenderá con sabores que posean la magia de las verduras; porque insiste en que comamos sano y exquisitamente sabroso, traemos una receta que encantará paladares como antes, cuando visitábamos ese templo de sabor: la casa de la abuela.

Cuando la abuela quiere que comamos rico y sano se esmera en preparar las más deliciosas recetas, como este Gratinado de acelgas y huevo especialmente hecho para encantar cuando los comensales no son muy adictos a las verduras.

Las acelgas son una verdura extraordinaria por diversos motivos: contienen vitaminas y minerales, pero muy pocas calorías, y resultan muy depurativas.

Si desea variar en la preparación sustituya los huevos por 4 salchichas crudas, vacíelas, haga bolitas con la carne, fríalas y repártalas sobre la verdura. Esta variante encantará sobre todo a los niños y niñas, que no dejarán escapar esta oportunidad de comer acelgas. En serio.

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Tiempo de elaboración| 55 minutos

Dificultad|Fácil

Personas|4

Ingredientes

  1. 8 huevos frescos
  2. 800 gramos de Acelga
  3. 2 cebollas rojas
  4. 4 cucharadas de mantequilla
  5. 40 gramos de jamón en dados
  6. Sal
  7. Pimienta blanca
  8. 3 cucharadas de harina
  9. 1/2 litro de leche
  10. 2 cucharadas de mostaza suave
  11. 125 gramos de gouda poco curado

Cómo preparar Gratinado de Acelgas y huevo

  1. Ponga agua a hervir en un cazo u olla e incorpore los huevos por 8 a 10 minutos hasta que estén duros. Luego, sumérjalos en agua fría y pélelos. Lave bien las acelgas y separe las hojas del tallo. Pique el tallo y troce las hojas.
  2. Pele las cebollas y píquelas finas. Funda una cuchara de mantequilla en una satén y sofría el jamón. Añada la cebolla y el picadillo de tallos de acelga. Incorpore después las hojas, aún húmedas, y déjelas hacerse unos 8 minutos. Salpimente.
  3. Caliente el horno a 200ºC (con la circulación de aire activada a 180 ºC).
  4. Funda el resto de la mantequilla en otra cazuela, fría la harina hasta que se dore, vierta la leche y llévelo a ebullición sin dejar de remover. Añada la mostaza y salpimente la salsa.
  5. Corte los huevos duros en rodajas gruesas. Vierta la mitad de la bechamel en una fuente refractoria honda, extienda luego la verdura y reparta las rodajas de huevo. Vierta el resto de la salsa por encima. Quítele la corteza al queso, rállelo grueso y espárzalo por encima.
  6. Gratine la preparación en el horno, a media altura, unos 15 minutos.

Sigue la huella de la Abuela y toma de su mano estas ricas preparaciones que siempre serán bienvenidas en tu mesa, para recordar a la matriarca y llenar el paladar de sus sabores y aromas con historia.
¿Cuáles son aquellas recetas que no deben faltar en esta sección? Insistimos, pone a tu estómago a recordar y cuéntanos de tus gustos con tintes de la abuela.

Foto: jlastras (cc Flickr)
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